Escribir diálogos es para muchos autores un auténtico quebradero de cabeza. Hoy queremos dejarte diez consejos rápidos para salir airosos de ese problema. Esto es un artículo de los de imprimir y tener al lado en el momento de la escritura. Vamos allá.
1.- No abusar de los “Dijo”.
Al escribir diálogos no siempre es necesario enunciar quién habla; a veces puede omitirse, ya que se sabe perfectamente quién lo está haciendo. También puedes usar algún sinónimo o cambiarlo por acciones y/o gestos.
2.- Con todo, es preferible un “dijo” a usar expresiones rebuscadas.
A veces, para cambiar de expresión, nos ponemos a colocar sinónimos como exhortar, aseverar, etc., que muchas veces no son los adecuados.
3.- Cada personaje debe tener su propio registro.
Todos tenemos forma de hablar característica que puede reflejarse en el uso de muletillas, o un lenguaje culto. Eso dependerá de cómo hayas construido al personaje. Esas diferencias deben quedar claras al escribir diálogos.
4.- Los diálogos deben estar planificados.
No puedes escribir diálogos con lo primero que se te ocurra; las escenas de dialogo deben tener un propósito. Necesitas tener claro a dónde quieres ir a parar con ese diálogo, qué debe aportar para tu novela.
5.- Los diálogos han de proporcionar información interesante para el lector y hacer que la trama avance.
Está íntimamente relacionado con el punto anterior. En general, elimina todo aquel material superfluo de tu novela. Eso incluye a los diálogos. Si el diálogo no aporta nada a la trama, elimínalo.
6.- Los diálogos deben ser dinámicos.
No pueden ser solo un intercambio frío de preguntas y respuestas. Es necesario que sirvan para conocer mejor a los personajes, sus actitudes y propósitos.
7.- Dosifica la información que va a revelarse en los diálogos.
Es un error común dar demasiada, o muy poca, información. Si te pasas, el lector perderá el interés porque ya sabrá lo que ocurre, no tendrá capacidad de sorpresa. Si te quedas corto, tu historia será muy confusa.
8.- Los personajes no deben decir lo que ya conocen solo para hacérselo saber al lector.
Esto es un error típico de novato. Debes tener en cuenta la lógica interna del relato. Al escribir diálogos, piensa que si ambos personajes ya conocen lo que están diciendo, no tiene sentido que hablen de ello. En un caso como este, y siempre que el lector necesite conocer un dato sobre el mundo en el que se mueven los personajes, es mejor usar al narrador.
9.- El narrador no debe adelantar la información que darán los personajes en el diálogo.
Sería redundante: Si ya lo ha dicho el narrador, ¿para qué vas a repetir la información?
10.- No llenes el diálogo de repeticiones e información superflua.
Ve al grano. Recuerda la importancia de que el diálogo aporte información al lector. ¿Te ha parecido útil? ¡Compártelo!
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