Caja de Letras

¿Quién se beneficia de las reseñas literarias?

Mercado Editorial

Iniciábamos esta serie de artículos sobre las reseñas literarias hace bastantes semanas, pero diversos asuntos se han interpuesto y hasta hoy nos ha sido imposible retomarla. Si recordáis, hablábamos aquí de cómo la crítica literaria tradicional había ido perdiendo fuerza y pasando a ser poco más que una herramienta al servicio editorial, mientras que en este otro artículo comentábamos la poca utilidad que solían tener muchos de los blogs dedicados a hacer reseñas. Nos despedíamos en ese artículo comentando que trataríamos de explicar qué cosas deben coincidir en una reseña para que sea útil. Pero antes hay que saber para quién debe ser útil la reseña. ¿Debe ser útil para el lector? ¿Debe ser útil para la editorial? ¿Para el librero? ¿O debe ser útil para el autor?

Pues, en realidad, para ninguna de esas figuras. Una reseña debe ser útil para el libro en sí mismo, para su promoción, para que pueda llegar, o evitar que llegue en caso de que la reseña desaconsejara su lectura, al máximo número de personas. Y para que esto suceda no basta con decir en una reseña que el libro ha gustado o no o hacerse eco de la sinopsis.

Si lo que queremos es que una reseña sea útil para la vida del libro, lo primero que tenemos que tener en cuenta son los plazos editoriales. Y estos son cortos, muy cortos. Uno de los problemas del mundo editorial es la cantidad de libros publicados. Es ingente, lo que provoca que la rotación en las mesas de novedades sea salvaje. Con suerte, y eso habiéndose publicado en una editorial potente, un libro pasará en las mesas de novedades mes y medio, tal vez dos (a menos que sea uno de los grandes lanzamientos del año, pero esos son los menos). Si en ese tiempo el libro no ha estallado y refleja buenas ventas, cede su sitio. Y, en el momento en el que desaparece de las mesas de novedades, deja de estar disponible para el lector. Son muchos los lectores que se ponen en contacto con el escritor de turno para decirle que un librero le ha comentado que su libro está descatalogado… ¡cuando no han pasado ni seis meses desde su publicación! Por tanto, si una reseña tarda en salir al mercado tres meses o más desde la fecha de publicación del libro, a menos que este sea un éxito de ventas, uno de los libros del año, en caso de que llegara a motivar al lector para hacerse con un ejemplar, habrá llegado demasiado tarde y, por tanto, será una reseña inútil como ayuda al libro.

Y ahora es cuando viene el problema, porque la mayoría de blogs no tienen en cuenta, ni tienen por qué hacerlo, esa ventana de venta del libro. Ellos reciben el libro, ese y otro montón de decenas más, se les acumulan las lecturas y leen a medida que les apetece. Al fin y al cabo, no cobran por ello, así que nadie les puede pedir nada. El resultado es que el único beneficiado de esta práctica reseñística es el equipo de administradores del blog, que tiene lecturas gratis todo el año, porque ni la editorial, (que cuando sale la reseña ya está volcada en la promoción de otro libro) ni el escritor, (que ve cómo la reseña no es útil para que le ayude en la promoción de su libro) ni el lector (que si se ha interesado por comprar el libro ya no lo encuentra en la librería) ni el librero (por los mismos motivos) y ni siquiera el libro, obtiene recompensa alguna, de modo que gran parte de los blogs de reseñas se convierten en algo tan inservible como la crítica literaria al servicio de las editoriales.

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16 Comentarios

  1. Miquel Codony

    ¿Puedo decir que el artículo me parece sesgado? Me lo parece, creo que usa una definición de «utilidad» muy parcial y centrada casi por completo en los aspectos promocionales del libro, cuando desde el punto de vista de muchos blogs eso es un factor que no tiene ningún peso. Me explico.Entiendo perfectamente que este planteamiento tiene algo de verdad, pero me parece demasiado utilitarista y que simplifica en exceso el ecosistema de los blogs literarios. Falta una pregunta que, me consta, es importante para muchos blogs. ¿Para quién es útil la reseña, preguntáis? Muchas veces para el que la escribe, que le saca con ella más jugo al libro y trata de promover una discusión en torno a él o, más a menudo, a su lectura personal. Cuando hablamos de blogs colectivos (estoy pensando en uno concreto pero no voy a hace publicidad aquí) el objetivo es aún más «hippy»: favorecer la discusión, la información y un tipo de razonamiento crítico que nos parece sano (y no entro a valorar la calidad del razonamiento, solo la actitud). Influir o no en la promoción del libro, muchas veces, es un factor que ni siquiera interviene en el proceso. Es evidente que hay blogs de diversos pelajes, simplemente hago hincapié en el tipo que me parece que el artículo deja de lado.La cuestión de la gratuidad o no de las lecturas es diferente, aunque relacionada, y no la metería en la misma discusión. Muchos blogs literarios reseñamos libros que, más a menudo que lo contrario, hemos comprado —y que conste que yo pido y recibo libros y que ME ENCANTA, pero no sistemáticamente—. No veo que el origen del libro tenga la más mínima importancia cuando se habla de la utilidad de una reseña en términos generales (sí veo que es un factor importante para la editorial que envía ejemplares de cortesía, por supuesto).Por lo demás, la serie de artículos me ha parecido interesante, aunque discrepe con el planteamiento de esta discusión 🙂

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    • admin

      Por supuesto, Miquel, aquí estamos hablando sobre todas esas reseñas que se realizan teniendo en cuenta que la editorial envía el libro de forma gratuita.Todo lo que se haga de forma particular y sin contar con las editoriales no tiene sentido dentro de esta serie de artículos.

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  2. Loren

    Habéis hablado de la poca utilidad de las reseñas en blogs, de la utilidad de los blogs en sí mismos, e incluso de qué es una reseña.Pero antes de seguir los posts temáticos sobre blogs, me gustaría preguntaros qué es para vosotros un blog. Si se pueden pedir artículos de opinión bajo demanda, me gustaría solicitaros justamente ese, que defináis qué es para vosotros un blog, sus características y si hay algún patrón que los defina.Creo que estaría bien que antes de entrar en materia puedan explicarse las características de los mismos y que los lectores sepan de antemano la definición de aquello de lo que se habla, porque buena parte del sector de la población todavía está pez en el tema..

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  3. Loren

    Habéis hablado de la poca utilidad de las reseñas en blogs, de la utilidad de los blogs en sí mismos, e incluso de qué es una reseña.Pero antes de seguir los posts temáticos sobre blogs, me gustaría preguntaros qué es para vosotros un blog. Si se pueden pedir artículos de opinión bajo demanda, me gustaría solicitaros justamente ese, que defináis qué es para vosotros un blog, sus características y si hay algún patrón que los defina.Creo que estaría bien que antes de entrar en materia puedan explicarse las características de los mismos y que los lectores sepan de antemano la definición de aquello de lo que se habla, porque buena parte del sector de la población todavía está pez en el tema.

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    • admin

      Pues lo tendremos en cuenta, Loren. Gracias. Un abrazo fuerte.

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  4. Jazmín

    Me pareció un poco insultante. Según el artículo, mis reseñas son todas inútiles porque no son de las supuestas novedades editoriales. Yo hago reseñas de lo que quiero y cuando quiero. Mientras la utilidad sea para mí, yo estoy satisfecha. En el texto habla de «utilidad» en una actividad que no se hace a cambio de dinero, sino por gusto personal. No me parece justo.Y no, mi blog no responde a editoriales, pero decir que una reseña no es útil si no entra en esos tiempos de publicación es generalizar demasiado.

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    • admin

      Buenos días, Jazmín.Lamentamos que te hayas sentido insultada, en absoluto es la intención. Si te fijas, tu «perfil» no entraría en el que estamos analizando en el artículo. En él hablamos de la utilidad de las reseñas de aquellos libros que envía la editorial como parte de la promoción de una novela. Puesto que tú reseñas «lo que quieres» no es el caso. Puede que hayas tenido esa impresión si no has leído los artículos anteriores, en los que dejamos bastante claro que el tema se analizará como fenómeno de sustitución a la crítica literaria. Si, como tú misma dices, tu blog no responde a las editoriales, no tienes por qué sentirte aludida por el artículo.Un abrazo y gracias por leernos.

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  5. Victor Selles

    Me parece que hay mucho ruido últimamente con el tema de las reseñas. Yo creo que este artículo está pensado para interesar a los editores, más que a los blogueros. Parece querer decir: Señores, no regaléis libros para reseñar, porque eso no va a mejorar la promoción.Los blogs son, casi siempre, plataformas de expresión individual. Cuando yo escribo una reseña en mi blog (http://moraldefrontera.blogspot.com), creo que la reseña resultará útil para la gente que me conoce como bloguero y que valora mi opinión. La mía. Ésa es la diferencia fundamental entre la crítica literaria tradicional -donde el crítico nos es desconocido en muchas ocasiones- y los blogs, que combinan las reseñas con otros textos y experiencias y que nos permiten conocer a la persona que está detrás.Por último, y con respecto a la cuestión principal de la entrada, el impacto que pueden tener las reseñas sobre las ventas puede ser bajo, pero es que el precio de un puñado de ejemplares para una editorial también es ínfimo, y la promoción se batalla en todos los frentes o en ninguno.Creo que hay muy pocos blogueros que escriban reseñas con el único objetivo de recibir ejemplares gratuitos de las editoriales. Si a mi me regalan un libro con el compromiso de reseñar, y el libro es infumable, para mí es un regalo envenenado. Me lo voy a tener que leer y escribir sobre él aunque no me apetezca. Para mí es perder en tiempo, en definitiva, cuando hay millones de libros fantásticos por el mundo.Los beneficiados al final son todos: El lector, si la reseña es buena (lo de que los libros desaparezcan a los seis meses es cosa del negocio tradicional. Eso va a cambiar para siempre con el libro electrónico. De hecho, ya ha cambiado). El bloguero, porque con las reseñas consigue más visitas. La editorial, porque obtiene visibilidad a coste prácticamente cero. Y el libro, porque con el suficiente número de reseñas, encuentra su lugar, ya sea en las estanterías o en una papelera…

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  6. Eiryah Udhen

    Vamos a ver, según he podido entender en lo que habéis escrito, os planteáis la utilidad de una reseña cuando normalmente suelen realizarse meses después de la salida del libro, bien porque al blog al que va dirigido se le han acumulado las lecturas, bien porque no le ha apetecido leerlo antes. Creo que aquí habría que matizar tres puntos importantes por la que una reseña puede salir más tarde de lo normal:1. Que el libro lo haya mandado la editorial muchos meses después de su publicación (que es lo que suele suceder), pese a que se le esté solicitando el ejemplar de prensa con otros tantos meses de antelación.1.1. Que la reseña esté hecha en su momento (o incluso antes de su salida al público) pero que la editorial decida (por alguna extraña motivación o simplemente por mero olvido), no colgarla en su red social y por lo tanto no darle publicidad al libro ni tampoco a la web en la que está publicada la reseña.2. Que el libro se esté leyendo casi simultáneamente con otras lecturas. En estos casos, la editorial y el escritor de cada uno de los libros también tienen mucha prisa para que salga para antes de ayer la reseña. Normalmente no dudan en ponerse en contacto con el reseñador de turno para ir presionando para que se publique lo antes posible y hasta en ocasiones se ha llegado a rozar el insulto. Pero centrándome en lo que al tiempo de lectura se refiere y su correspondiente reseña, podría dedicarme a comentar lo que es una crítica de calidad o una web profesional (no porque cobre dinero a la hora de realizar las reseñas, sino porque decida llevar a cabo su labor de forma perfecta). Hay quienes acaban los libros hasta la última palabra -no olvidemos que los que nos dedicamos a esto amamos leer y eso siempre será lo primero-, y hay quienes únicamente se leen 150 páginas para tener una leve idea de cómo va a salir la cosa. Hay quienes incluso se leen la sinopsis (y que conste que esto también ocurre con lugares en los que se paga por hacer esas reseñas, siendo además éstos los lugares en los que más frecuentemente se realiza esta práctica), de la cual se saca la consiguiente crítica. Por lo que si te consideras alguien profesional y llegas hasta el final, necesitarás más tiempo para poder hacerlo.3. Que tengas vida, en cuyo caso, si tienes que compaginar una afición -porque los blogs salvo rarísimas excepciones no cobramos nada- con tu vida diaria en la cual se incluyen proyectos de formación, familia, problemas, diversión y demás… quizás no te compense correr con la reseña de tal o cual libro, ya sea porque se dan los dos casos anteriores, porque el autor/a está siendo maleducado contigo y no te sientas en la obligación de empeñar tu tiempo libre o porque el libro no tiene la calidad que el escritor cree que tiene y necesitas un tiempo para meditar qué es lo que vas a decir. Es muy peligroso apretarle demasiado a un reseñador con un libro que se le ha atragantado porque quizás quien ha escrito el libro se pueda llevar una sorpresa desagradable. Hablando hace poco con un buen amigo que también se mueve en este mundillo, recordamos que todos los que nos dedicamos a reseñar tenemos una espinita clavada con algunos libros con los que quizás hemos sido benévolos de más -por distintas cuestiones claro está-, cuando posiblemente a día de hoy, tendríamos una opinión muy distinta. Por haber madurado más el libro y caer en la cuenta de algunos detalles que pasamos por alto, por haber llegado a leer otras cosas de ese mismo autor, o directamente por encontrarnos en otro estado anímico.Ahora bien, hablando sobre la utilidad que tiene una reseña para la venta de un libro cuando ha pasado cierto tiempo, me gustaría referirme a la intervención que tuve este mismo año (por el mes de marzo creo recordar) en las II Jornadas de Novela Histórica de Granada. El tema de la mesa redonda era entre otras cosas: «(…)Medios editoriales» en referencia a las internet, su relación con las redes, los blogs y la importancia de las reseñas precisamente.En vez de explicar aquí cual fue mi intervención, voy a poneros un ejemplo: Imaginaos que las editoriales gracias a artículos como este decidieran no mandar más ejemplares a ningún blog, -citando lo dicho más arriba: «El resultado es que el único beneficiado de esta práctica reseñística es el equipo de administradores del blog, que tiene lecturas gratis todo el año»-, ya que les queda claro que no sólo no ganan nada con esta práctica, sino que es la excusa perfecta para minimizar gastos en un sector ya castigado. El único escaparate en el que las obras de algunos autores (hablo principalmente de los españoles, ya que algunos que vienen del extranjero tienen una campaña de marketing brutal) sería el de las librerías, donde únicamente estarían ese mes que durase la vida «útil» de la obra. Alguna que otra mesa como la de los grandes almacenes más famosos y quizás la poca -por no decir nula-publicidad que le dará la editorial. Una vez pasado este tiempo el libro efectivamente caería en el olvido, se perdería entre los palés de grandes almacenes cogiendo polvo al más puro estilo del Arca de la Alianza del Doctor Jones y punto. En ese momento se ha acabado la vida útil de ese libro -que pasará a alimentar las llamas de alguna incineradora industrial-, el escritor/a de turno habría tenido muchas menos ventas -es evidente que si quiere una mayor publicidad habría que pagarla o conseguirla mediante contactos que quizás no tenga todo el mundo-, y seguramente ninguna editorial querría publicarle nada más a esa persona, vista la falta de éxito que tuvo su anterior obra.¿Y qué importancia tienen los blogs a raíz de este ejemplo? Pues toda, sinceramente. En los blogs gracias a que necesitamos las visitas de los «parroquianos» más fieles, porque realizamos concursos o porque hay una marea incesante de gente navegando entre distintos «puertos», podemos reflota» algunas reseñas antiguas si se tercia para volver a llamar la atención sobre ciertas obras. La mayoría de estos rincones tienen sliders (o presentaciones secuenciales de imágenes), donde los contenidos antiguos suelen ir pasando ante los ojos de los visitantes de forma constante, permitiendo que realmente la vida hábil de esa obra se alargue en el tiempo. De esta manera, si para la editorial el escritor y esa novela ya están acabados en un mes, los blogs permitimos que durante al menos 3 más, esa novela siga teniendo vigencia. Si por algún casual la reseña sale después de esos tres meses, la vida hábil incluso llega a prolongarse más, ya que se podría considerar una «segunda campaña publicitaria», que ayuda a que el público vuelva a centrar su ya dispersa atención, hacia algo que se le está recomendando. No olvidemos además que en los blogs hay verdaderas comunidades de personas que valoran muy positivamente la opinión de los reseñadores a los que leen más frecuentemente, lo que garantiza que aunque sea en digital -donde las obras suelen permanecer durante mucho más tiempo-, ese lector pueda acceder a la obra. Si es en físico, y como bien han comentado por aquí, el lector puede recurrir a fondos editoriales, a librerías de segunda mano o de ocasión, a diversas ferias del libro o a una biblioteca donde -aunque no cuente para los beneficios del escritor- ese lector tenga contacto con la obra de ese autor y en un futuro se anime a comprar una siguiente obra.Para finalizar, y saliendo al paso de una posible respuesta del estilo: «Ya se sabe que hay lugares donde se trabaja de forma profesional, pero no hay que olvidar que hay otros en los que se aprovechan de esos ejemplares gratuitos e incluso cuelgan los libros digitales en plataformas de piratería» tengo que decir algo que considero importante. Esto ya es algo recurrente que he podido leer hasta ahora en varios artículos de este estilo. En todos los oficios siempre hay malas personas. Hay talleres mecánicos donde llevas al coche para que te cambien una rueda por 50€ y sales de allí con una factura de 200€ porque te han tenido que reparar un eje invisible que tenías partido y con el que no saben cómo has podido llegar rodando hasta allí. También hay médicos que se dejan las tijeras dentro de un señor e incluso aseguradoras que te hacen firmar un seguro de hogar para que luego cuando algo pasa, te digan que únicamente te cubrían en caso de que te cayese un meteorito de exactamente 200 kilómetros de ancho y no una gotera. En ningún caso he visto que en estos artículos -casualmente escritos todos por escritores o por personas cercanas a escritores-, se hable del bien que hacen los blogs de cara a la publicidad tanto de ellos como autores, como de sus novelas ante la impasibilidad de unas editoriales que les tratan como si fuesen mercancía perecedera. No creo que sea correcto señalar al «factor blog» como el responsable de las calamidades de que algunas novelas tengan malas críticas o no hayan tenido suficiente éxito -en este caso planteándose la utilidad de las reseñas-. Nosotros somos el vínculo que une a los autores en su Olimpo con la gente normal que busca opiniones, como quien busca cuantas estrellas tiene un hotel en TripAdvisor. La gente quiere que se explique si un libro mola o no con un lenguaje directo, sin florituras ni barroquismos que le hagan plantearse una futura compra. Normalmente todas las webs ya hacemos mucha más publicidad de la que hacen las editoriales cuando nos buscamos las habichuelas para sonsacarles -si, me gustaría poder subrayar la palabra «sonsacarles»- las novedades de un mes para otro, porque hay ocasiones en las que realmente les cuesta. Nosotros somos los que publicitamos todas esas obras que normalmente se quedan perdidas entre las mesas de novedades,en los rincones oscuros de las estanterías o los que rescatamos algunos diamantes en bruto de su olvido. Y todo ello por el coste de lo que a la editorial le cuesta enviar un paquete -normalmente una cantidad irrisoria gracias a su tarifa reducida-. Me parece a mi que es un pago más que justificado por invertir tiempo, que es al fin y al cabo lo que se invierte, algo que no se puede recuperar nunca y que únicamente podemos compensar si lo que leemos nos gusta. Si no se nos mandasen esos libros -aunque luego salgan las reseñas tarde-, muchos no podríamos leer nada de esas obras, porque la gran mayoría no tendríamos ni un duro para poder adquirirlas, (lo siento, prefiero comprar comida para mi casa que no libros), o bien tendríamos que optar por eso que nadie quiere pronunciar en voz alta: la piratería.Si en algún momento vuelve a aparecer en alguna cabeza la utilidad de una reseña después de X meses de su salida a la venta al público pensad en esto: Cuando se encuentra material de rol descatalogado -por favor, subrayar mentalmente también esta palabra… – y empiezan a aparecer reseñas hablando de sus virtudes. ¿Sabéis por qué puede costar el triple de su valor original? Porque lo que es bueno lo seguirá siendo pase 1 mes, 3 meses o 20 años. La espada rota de Poul Anderson no tuvo el mismo éxito que ESDLA de Tolkien, porque salieron a la vez. La historia de Frodo y el anillo ganó en visibilidad frente a la de Anderson pero eso no quiere decir que la historia de La espada rota no sea una verdadera obra maestra considerada como un clásico. No todo puede ser contemplado desde el lado del beneficio económico, mucho más pensando en que una parte de todo ese proceso no gana nada con su esfuerzo.Así que bueno, si os paráis a pensar en el contenido que tienen la gran mayoría de blogs, ¿cuál es?. Principalmente noticias y reseñas. Las noticias suelen ser las mismas en todos los medios ya que suelen surgir de la misma fuente. Es las reseñas lo que le da a cada rincón su «color» particular. La forma de expresarse de sus redactores, las imágenes que se utilicen para acompañar al texto e incluso la forma en la que se maqueta,es lo que identifica a cada lugar igual que podría hacerlo un cartel en la puerta de un comercio. Si empezamos a plantearnos qué utilidad tienen las reseñas si no se hacen instantáneamente en cuanto se recibe el libro -o se compra- y se da la falsa sensación de que únicamente se crean estos lugares como una forma de aprovecharse de un material gratis, destacando en ocasiones la falta de profesionalidad o de cultura de los que reseñan -por la forma en la que dan sus opiniones-, se está afirmando aunque de una forma sesgada, que esos rincones de cultura por la red no tienen razón de ser. Más que nada porque sin reseñas, no hay blogs, sólo comentarios y Facebook.

    Responder
    • admin

      Bueno, el comentario es largo así que responderemos solo a algunos de los puntos que comentas.No eres la primera que habla sobre las librerías de fondo editorial. Existen, están ahí, y hacen su labor. Pero el porcentaje de venta de libros en las librerías de fondo es ridículamente bajo. El 90ymuchos por ciento de la venta de un libro se produce durante la campaña de lanzamiento. Lo que comentábamos de que muchos libreros te dicen a los seis meses de salir el libro a la venta que está descatalogado, o que no te pueden conseguir un ejemplar. Esto es una realidad con la que muchísimos escritores ya se han encontrado.Con respecto a las ventas en digital, pues pasa algo parecido. El índice de ventas de novelas en formato digital está muy por debajo del 10% del total de las ventas de un título. De modo que ni una forma de venta ni la otra son realmente efectivas para dar a conocer a una obra o a su autor. Pero aunque lo fueran, de entre ese porcentaje que podríamos cuadrar en torno al 8% de ventas, habría que establecer cuántas vienen directamente a través de una reseña; el porcentaje de esto último sería ínfimo.Por último, creemos que hay aspectos del artículo que no has entendido, o bien, que has entendido de una forma distorsionada por el hecho de que te afecta personalmente. Decimos esto porque, en ningún momento, ya no en este artículo, sino en ninguno de los anteriores, hemos cargado las culpas de la falta de venta en los blogs. Eso sería matar moscas a cañonazos. No. Lo que estamos haciendo en esta serie de artículos es hablar sobre la crítica literaria. En el primero vimos que la crítica tradicional, en general, no es efectiva por una serie de razones: hay poco espacio en los medios, los medios pertenecen a grupos editoriales, etc. Nadie puso el grito en el cielo, cuando a nosotros nos parece que es bastante más llamativo. ¿Hay medios que hacen buena crítica literaria? Evidentemente.En este último artículo (que no es el último de la serie) decimos que, en general, las reseñas literarias no son válidas como medio de promoción para un libro porque, normalmente, salen cuando el libro ya es difícil de encontrar en librerías. Es una realidad que gustará más o menos, pero que está ahí. Muchas editoriales se están replanteando su política con respecto a los blogs literarios. ¿Es culpa en exclusiva de los blogs? Por supuesto que no. Pero de todo eso hablaremos en otro artículo.Un abrazo.

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  7. María José

    Ay, entiendo el contexto en el que estáis situando este artículo, pero aún así el último párrafo me parece bastante desafortunado. El hecho de que una reseña individual, gratuita (o compensada a un precio ridículamente bajo, el de un ejemplar de un libro) no ayude a vender libros no creo que sirva para afirmar que el único beneficiario es el blog, o el reseñista.Independientemente de que las reseñas sean buenas o malas, serias o poco serias (que no es lo que se comenta aquí), creo que muchas editoriales han abusado de estos espacios hasta pervertir este sistema. En un momento dado vieron una vía para la promoción semigratuita, y cuando se ha demostrado (en eso puedo estar de acuerdo) que quizá no tiene el impacto que esperaban por el propio funcionamiento del ciclo del libro, se dan cuenta de que han hecho el tonto y se lo replantean. Claro que no lo tienen, claro que no pueden tenerlo nueve de cada diez veces. Es gente escribiendo gratis, no trabajando a cambio de un sueldo.Yo aquí no hablaría de beneficiarios (su trabajo ne me parece recompensado en ningún caso); hablaría de los responsables que han dejado que esto se vaya de las manos, que han esperado recibir mucho a cambio de casi nada. Eso no sucede en ningún otro negocio.En realidad yo no creo que la reseña del blog deba servir para vender libros en absoluto, claro. Ni libros ni ninguna otra cosa. Para eso está la publicidad, los actos de promoción, los periodistas culturales. No digo que no sea legítimo hacerlo, cada uno es libre de hacer lo que quiera, por supuesto. Pero la reseña gratuita y espontánea de un lector enriquece el debate en torno a esa obra, en torno a la literatura, en un espacio público en el que podemos dialogar con otras personas. Me parece más que suficiente para justificarla. Qué pena que el criterio comercial se interponga en todo eso, ¿no?

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    • admin

      No podríamos estar más de acuerdo con tu comentario. Evidentemente, el último párrafo del artículo tiene una carga de ironía que, parece, no se ha captado… Queda claro que el hecho de recibir un libro, en sí mismo, es un beneficio escaso. A la larga sí te ahorras un dinero, claro, pero poco más.El motivo del artículo es dejar claro que, tal como está montado el sistema, las reseñas de libros no son útiles para lo que todos los implicados, a priori, pretenden: recomendar o no la compra de determinado título, tal como tú muy bien dices.

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  8. Miquel Codony

    A raiz del comentario de Eiryah, que contiene varios puntos con los que estoy de acuerdo completa o parcialmente, comento el único con el que discrepo completamente:»Imaginaos que las editoriales gracias a artículos como este decidieran no mandar más ejemplares a ningún blog» … «El único escaparate en el que las obras de algunos autores […] sería el de las librerías»Estoy convencido de que esto no sería así. Claro, los libros que se reseñarían serían otros; seguramente se reduciría la proporción de reseñas de novedades y todos (aquí soy malvado) saldríamos ganando, pero… ¿los blogs literarios? Claro que seguirían existiendo. Muchos estamos aquí porque nos gusta leer, nos gusta escribir (aunque no sea narrativa) y nos gusta hablar de libros. El que sean novedades y ejemplares promocionales es lo de menos. De hecho, mi experiencia personal y por tanto no generalizable, es que pedí libros a las editoriales cuando descubrí (no hace tanto) que se podía hacer y que te los enviaban y que cada vez lo hago menos porque… porque estoy hasta las narices de tener que leer solo novedades. Vamos, que el mapa de los blogs literarios se transformaría pero seguiría habiendo mapa.Y otro comentario a raíz de un punto de la respuesta de Admin:»No eres la primera que habla sobre las librerías de fondo editorial. Existen, están ahí, y hacen su labor. Pero el porcentaje de venta de libros en las librerías de fondo es ridículamente bajo.»Ridiculamente bajo, claro, en las librerías tradicionales. El modelo amazon (que tiene cosas muy malas y cosas muy buenas) se basa, precisamente, en la explotación de la «larga cola». Corro a aclarar que no me refiero a nada cochino, solo a la viabilidad de algunos negocios que le dan continuidad a la estantería de fondo. Sospecho —pero reconozco que no es más que eso: sospecha— que en las librerías especializadas pasa algo similar. En muchas otras no, de acuerdo, pero hay más de un modelo posible y el tema de la «utilidad» (y me rechinan los dientes cada vez que veo esa palabra en el contexto de los blogs, lo juro) no es tan fácil de acotar.Y lo del ebook cambiará, ya lo está haciendo. Especialmente en el ámbito de la literatura de género.Admin también dice:»En este último artículo […] decimos que […] las reseñas literarias no son válidas como medio de promoción para un libro porque […] salen cuando el libro ya es difícil de encontrar en librerías.»En esto estoy bastante de acuerdo. Lo que pasa es que no creo que las editoriales puedan valorar este tipo de promoción a nivel de reseñas individuales. Es un escaparate más, pero un escaparate general. O estás en el círculo de reseñas o no lo estás. Intuitivamente pare que estar tenga que ser mejor. Pero insisto que hablo de estar en esa nube difusa de la blogosfera, valorar la utilidad de una reseña concreta, salvo posibles excepciones, es ingenuo. Y esto sin negar que no todos los blogs son iguales: los hay buenos, los hay regulares y los hay malos. ¿Y sabes? ¿Para acabar de liarlo? Creo que desde el punto de vista de la utilidad promocional algunos malos pueden ser más efectivos que algunos buenos :-)Ahí queda eso.

    Responder
    • admin

      Claro, Miquel. Pero es que las librerías tradicionales son la mayoría… ¿Cuántas librerías de fondo hay en una ciudad? Pues muy pocas. Eso sin contar con que la gran mayoría de los libros en este país se venden en: Carrefour, Corte Inglés, Fnac, Casa del Libro.No toméis este artículo como uno individual, sino enlazándolo con los anteriores de la serie y entenderéis con más claridad de lo que estamos hablando: de la reseña como medio de promoción y crítica de una novela.

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  9. Eiryah Udhen

    Creo que también hay que tener en cuenta que depende mucho del lugar al que vayas a comprar o a preguntar por cierto libro. Ha habido sitios donde hemos ido a buscar una novedad (pero recién salida el día anterior o ese mismo día) y nos han llegado a decir que el libro o bien no existía o estaba descatalogado. Es evidente que también hay que contar con la profesionalidad de la persona que te atiende. Al igual que hay que tener en cuenta qué cantidad de ejemplares se editan de cada libro y si la distribución está siendo adecuada, al igual que vigilar la colocación de ciertas colecciones o de libros de cierta temática. (Por poneros un ejemplo, recuerdo que el libro de Aki y el misterio de los cerezos (Carlos Bassas) lo encontré en la sección de esoterismo, y no fue un ejemplar, sino 5 o 6, igual que el de Las torres de febrero de Tonke Dragt). xDY bueno, sobre lo que habéis comentado los dos, tanto Codony como el Admin sobre mi ejemplo de no mandar cosas a los blogs y tal… Es evidente, que si quieres tener una revista, un portal o un blog dedicado a informar de la actualidad, necesitas tener novedades. Es evidente que muchos de nosotros ya hemos pasado a no pedir según qué cosas porque nos agobia la sombra del: «Lo ha pedido como un gorrón y no lo ha reseñado» xDD. Si no se tienen novedades en el blog será un blog de otra cosa, evidentemente no dejará de ser lo que es, pero su intencionalidad no será la misma. No nos equivoquemos, soy perfectamente consciente de que una reseña de un libro después de un año ya no sirve absolutamente para nada, pero sí que creo en la utilidad que pueden tener las reseñas -como dije antes para refrescar la mente o volver a levantar el interés por el libro- aunque ya haya pasado su momento álgido en las librerías en un periodo de tiempo razonable.

    Responder
  10. Carmelo

    Es muy lamentable, pero esta entrada está desactualizada. La internet dio intemporalidad a la información, es tan el caso, que un blog escrito en el 2002, me será útil en el 2040 siempre y cuando la información allí compartida sea verídica. El libro hoy en día no depende tanto de su disponibilidad inmediata, sino de su huella. Esto es, quién y cuánto se habló de éste en la red. De allí que los blogs (serios) de reseñas contribuyan a su fortuna. Pues sí logro con una reseña bien escrita en el 2007 de Corazón tan blanco ( obra de JM, hoy día descatalogada) iré a iberlibro.com o casadelibro.com y lo compraré. Lo compraré porque leí una entrada de hace diez años….escrita por X en un X tiempo.

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